Votar o No Votar!


“La Democracia es la dictadura de la mayoría”

                                                                                    JHerrero

 

Allá por el año ‘98 el Estado comenzó a considerarme mayor como para permitirme participar en su juego. Sin ideología política definida, siendo más afín a las creencias conservadoras o a la derecha del espectro político, era evidente que mi participación en las próximas elecciones sería hacia los grupos políticos con esa inclinación.

 

Con el efecto 2000 aun haciendo temblar a todos los informáticos del planeta, llegó mi oportunidad y en el doce marzo ejercí mi solemne derecho al sufragio.

 

Repetían en el cargo los populares, tras cuatro años en los que dejamos atrás dieciséis años de un socialismo que, si bien necesario, había fermentado tras más de una década en el poder.

 

La alternancia política entre Rojos y Azules en este país es un hecho bien acreditado, como los escándalos de corrupción que salpican a todos. Con una alternativa política que no es mejor, y unos programas ideológicos que ni por asomo puedo decir que cumplan ni con la mitad de mis expectativas, llego a la conclusión que, tal y como se suele decir “en el centro esta la virtud” y para ello debería seleccionar ideas de cada uno de los partidos que conforman el abanico político.

 

Vistos los escándalos de corrupción, a babor y estribor, así como unas promesas (programas políticos) que nunca se cumplen, llegamos al año 2003, mis primeras Elecciones Autonómicas, en las que no estoy nada convencido en participar y regalaré a las instituciones el máximo desprecio con mi abstención.

 

Elecciones al Parlamento de Cantabria (35), primera fuerza política el Partido Popular (18), segunda el Partido Socialista (13) y tercera el Partido Regionalista (8). La magia de la democracia hizo que se nombrara como presidente de esta mi comunidad al Sr. Miguel Angel Revilla (PRC) quien es cabeza de lista de la TERCERA fuerza política más votada.

 

Con una ideología política que se mimetiza con ambas partes del campo político, llega al poder aupado por el perro del hortelano (PSOE), quien como no saca escaños suficientes prefiere matar de hambre a quien obtuvo mayoría (PP) con tal de que no comieran. Traducido al castellano del pueblo, la brujería de la democracia lleva al trono al partido “menos” agraciado.

  

Nunca más”, al más puro estilo de la narrativa inglesa me despedí de la democracia, a sabiendas de que permanecerá allí para siempre.

 

Hoy veintitrés (23) años después y siete (7) procesos electorales en los que se reiteran los escándalos de corrupción y las promesas sin cumplir, sigo y seguiré sin participar en esta divina comedia.

 

Pero surgen las dudas entre los que, como yo, no se sienten representados por ninguno de los partidos políticos paridos en los últimos años y dudan si la mejor opción es la abstención, el voto en blanco o el nulo, y es por esto por lo que nacen estas líneas en las que pretendo dar una exposición de las consecuencias políticas que arrastran cada una de ellas.

 

Ley Orgánica 5/1985 del Régimen General Electoral, será el marco jurídico que acompañe a todo lo relacionado con el juego político del “Trile” y tratando de ser lo más sintético posible, la norma nos habla de votos validos y no validos o nulos.

 

Los Votos Válidos son aquello que se COMPUTAN para el reparto de los escaños y son tanto los votos que contengan una papeleta con indicación de un partido concreto, como los votos en blanco, considerándose estos, el sobre que no contenga papeleta y, además, en las elecciones para el Senado, las papeletas que no contengan indicación a favor de ninguno de los candidatos"

                                                                       

                                                                      VOTAR = VOTO BLANCO

 

Los Votos Nulos o No Validos son aquellos que entre otras, son emitidos en sobre o papeleta diferente del modelo oficial, así como el emitido en papeleta sin sobre o en sobre que contenga más de una papeleta de distinta candidatura, y por tanto NO COMPUTAN para el reparto de escaños.

La Abstención, al no emitirse el voto tampoco computa para la suma en el reparto de los votos.


       VOTO NULO = ABSTENCION


Ahora que sabemos que suma y que no a la hora de repartirse la democracia, toca conocer cuales son las reglas para el reparto. En este sentido, hablaremos del sistema o método D'Hondt.

  

Un método de promedio mayor para asignar escaños en los sistemas de representación proporcional por listas electorales. Los métodos de promedio mayor se caracterizan por dividir mediante sucesivos divisores los totales de los votos obtenidos por los distintos partidos, dando secuencias de cocientes decrecientes para cada partido y asignando los escaños a los promedios más altos.

 

En lengua vernácula, los votos en blanco favorecen a las listas más votadas en detrimento de los partidos minoritarios, es decir que si piensas ir a votar en blanco vas a conseguir justo lo que no quieres, esto es beneficiar a quien no quieres.

 

Yo elegí hace 23 años, no pierdo pierdo  el tiempo en su juego impuesto, nos vemos cuando exista voluntad real de cambio. !Ahora tu eliges que quieres!

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